El presidente se reunió con los gobernadores del PJ Arcioni, Bordet, Insfrán, Jalil, Kicillof, Quintela, Jaldo, Uñac, Zamora y Ziliotto, para discutir la estrategia que adoptarán frente al revés judicial en la Corte Suprema, que implica un recorte de unos $187 millones en el reparto a las provincias. Herrera Ahuad, Capitanich, Melella y Alicia Kirchner, se conectaron en forma remota.
El Presidente Alberto Fernández recibió este jueves a diez gobernadores oficialistas en la Casa Rosada para dar un mensaje político contra la Corte Suprema, luego del fallo del máximo tribunal que repuso parte de la coparticipación que el Gobierno le recortó a la ciudad de Buenas Aires en 2020. Se estima que el fallo implica un recorte de $183 millones, que no podrán ser repartidos entre las provincias.
A la sede de gobierno asistieron diez mandatarios provinciales que optaron por viajar a Capital Federal tras la convocatoria que hizo ayer la Presidencia cuando se conoció el fallo de la Corte: Gildo Insfrán (Formosa), Osvaldo Jaldo (Tucumán), Gustavo Bordet (Entre Ríos), Sergio Uñac (San Juan), Ricardo Quintela (La Rioja), Gerardo Zamora (Santiago del Estero), Axel Kicillof (Buenos Aires), Mariano Arcioni (Chubut), Sergio Ziliotto (La Pampa) y Raúl Jalil (Catamarca).
De forma remota, en tanto, se conectaron a la reunión Jorge Capitanich (Chaco), Oscar Herrera Ahuad (Misiones), Gustavo Melella (Tierra del Fuego) y Alicia Kirchner (Santa Cruz).
Según informó La Nación, los gobernadores que integran Juntos por el Cambio no fueron convocados al encuentro. También faltaron Arabela Carreras (Río Negro), Juan Schiaretti (Córdoba), Gustavo Sáenz (Salta), Omar Gutiérrez (Neuquén), mandatarios que no abrevan en el Frente de Todos. Sorprendió, en cambio el faltazo de otros dos gobernadores oficialistas: Alberto Rodríguez Saá (San Luis) y Omar Perotti (Santa Fe). Ayer, el diputado santafecino Roberto Mirabella -del riñón del gobernador- fue uno de los que no dio quórum para la última sesión del año en la Cámara baja.
También se sumó a la reunión el ministro del Interior, Eduardo “Wado” de Pedro, que recibió a algunos en sus oficinas de la planta baja de la Casa Rosada antes de subir al Salón Eva Perón para reunirse con el Presidente. De Pedro vuelve a compartir así una actividad política e institucional con Fernández, una novedad luego del vacío que él y otros funcionarios kirchneristas le hicieron al Presidente la semana pasada en el acto por los tres años de gestión.
De Pedro había sido un actor protagónico de la puja con Horacio Rodríguez Larreta por los fondos asignados a la Capital Federal. Hubo un sinfín de reuniones entre funcionarios de su ministerio y representantes del gobierno porteño para intentar llegar a un acuerdo -que no se logró- antes de que la Corte resolviera la cautelar que presentó la Ciudad. “Incoherente y antifederal es sacarles recursos a las provincias para darle al Gobierno de la Ciudad, el más rico del país”, bramó el ministro en Twitter.
La puja con la Ciudad por la coparticipación le sirve a Fernández para hacer causa común con los gobernadores peronistas en un momento delicado, tanto por el desdén que recibe del kirchnerismo como por la frialdad que exhibieron en los últimos días los mandatarios provinciales y la CGT.