Medios nacionales se hicieron eco del fuerte gasto que realizó el estado nacional en la construcción de un edificio “con alto contenido simbólico” para el expresidente Néstor Kirchner, en el que se encuentra el Centro Cultural homónimo, inaugurado ayer por la presidente Cristina Fernández. La obra calificada de faraónica, en recuerdo del expresidente y esposo de CFK, alcanzó un costo de casi 2500 millones de pesos.
La placa instalada en la entrada del centro cultural Néstor Kirchner lo dice todo. En letras de molde y para la posteridad, el Estado nacional explicó que el flamante edificio tiene «un alto contenido simbólico para la comunidad en general y para Néstor Kirchner en particular, ya que era hijo de un trabajador postal, quien en sus viajes desde Río Gallegos a Buenos Airessolía visitar el edificio y recorrer sus instalaciones».
Este jueves, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner inauguró el monumental espacio que significó la remodelación millonaria del edificio del ex Correo Central. De acuerdo con Perfil, en seis años su presupuesto se triplicó. Pasó de 926 a 2469 millones de pesos, algo que justificó el Ministerio de Planificación Federal por «actualizaciones y aspectos vinculados con infraestructura, equipamiento y operación preventiva, correctiva y permanente», según informó La Nación.
El centro cultural tiene 110.000 metros cuadrados y una sala sinfónica central con capacidad para 1950 espectadores, que alojará un imponente órgano de viento, de 3500 tubos y 46 registros, diseñado especialmente en Alemania por la firma Klais. Tiene, además, una estructura vidriada, el Chandelier, que cuelga desde el techo y se convertirá en un museo de arte contemporáneo.
También habrá una sala de música de cámara para 600 espectadores; 51 salas de exposición; una cúpula que da la vuelta por todo el diámetro del edificio con terrazas abiertas; tres restaurantes; 16 salas de ensayo; 18 vestíbulos, y 20 camarines.
El Centro Cultural fue inaugurado en el marco de la campaña electoral del oficialismo. Es decir, una muestra más de la gestión del gobierno nacional. Pero el carácter personalista del kirchnerismo hace que el Centro pase a ser una referencia emblemática al expresidente fallecido.