Vecinos del barrio “Los Pumitas”, al Noroeste de la ciudad, se llevaron electrodomésticos y muebles de un domicilio; y luego incendiaron el lugar.
Tras el crimen de Máximo Jerez, el niño de 12 años que fue asesinado a balazos el domingo por la madrugada en un ataque que dejó además a otros tres chicos heridos, la escalada de violencia en Rosario no para. Este lunes desde el mediodía, vecinos atacaron la casa de un dealer ligado Cristian Carlos Villazón, alias “El Salteño”, un hombre preso por homicidio al que acusan de ser el capo narco del barrio “Los Pumitas”, al Noroeste de la ciudad. Pero eso no fue todo: también saquearon e incendiaron otro presunto kiosco de drogas.
El segundo ataque comenzó cerca de las 15. Encapuchados y con remeras que les cubrían el rostro, los vecinos comenzaron a ingresar a un segundo domicilio sindicado como narco y empezaron a llevarse todo lo que encontraban en la propiedad vacía.
Los vecinos ingresaban como una turba al presunto búnker. Se apoderaron de una moto, bicicletas, electrodomésticos, un tanque de agua, colchones, muebles, cajas de ropa y zapatillas e, incluso, hasta los marcos de las ventanas y la parrilla.
Luego de vaciar por completo la propiedad, lo prendieron fuego. Todo sucedió sin que interviniera las fuerzas de seguridad y ante las cámaras de televisión que mostraban en vivo la anarquía vecinal. Una vez que el incendio parecía descontrolarse, llegaron los bomberos -con custodia policial- para aplacar las llamas.
Fuente: INFOBAE