Tanto es el furor que genera Lionel Messi en todo el mundo que obliga a desplegar alrededor suyo un operativo de seguridad descomunal a cada lugar que va. Y Arabia Saudita no fue la excepción, ya que en la llegada de Leo, la policía lo custodió con las armas de fuego a la vista.
Apretado entre la gente, Leo intentó salir del aeropuerto pero antes de lograrlo se llevó un susto, ya que uno de los policías que lo custodiaba tenía colgado una escopeta que, en un momento, quedó apuntándole a la cara.
Leo llegó cerca de las 22 locales (16 de Argentina) en un micro proveniente del aeropuerto junto a Javier Mascherano, Rodrigo Palacio, Fabián Monzón, `Tino` Costa y Cristian Alvarez.
En el lujoso Hotel Ritz-Carlton, bajo extremas medidas de seguridad, los futbolistas esquivaron el lobby, donde se habían reunido cerca de 60 personas, e ingresaron por una puerta lateral para subir inmediatamente al noveno piso.