El diputado provincial Hugo Escalada, del grupo Vanguardia Radical, se pasó al kirchnerismo y posó junto al dirigente “convertido” Leopoldo Moreau y la presidente Cristina Fernández de Kirchner. Fue durante un congreso de los llamados “Radicales Sin Fronteras”, dirigentes que dicen adscribir a un “radicalismo popular” y que, tras el acuerdo con el PRO, ha optado por pasarse al oficialismo nacional. La oradora del cierre del encuentro no fue otra que la presidente CFK, quien además, estuvo acompañada por el Ministro del Interior y precandidato presidencial Florencio Randazzo.
El, para muchos, impresentable Leopoldo Moreau, es quien lidera a esta facción de radicales que se han distanciado de la conducción del partido, tras el acuerdo con el PRO, firmado en el Congreso de Gualeguaychú. Se presume que estos radicales “sin fronteras”, apoyarán a los candidatos del Frente Para la Victoria y en este sentido, no resulta demasiado extraño ver a Escalada con este sector.
En la semana pasada, participó del programa ultraoficialista 6-7-8 para denostar a la UCR Misiones por haberlo expulsado del partido junto a María Losada –otra dirigente del grupo Vanguardia Radical, enfrentado con el Comité Provincia. En ese ciclo, Losada y Escalada se autovictimizaron diciendo que fueron expulsados del partido por rechazar el acuerdo electoral con el PRO, para competir en las PASO de Agosto en un único espacio.
Esta semana, en M4, insistieron en este planteo que intenta ubicarlos dentro de un radicalismo progresista, que sería acompañado por los militantes que se también se oponen a un acercamiento con las huestes del macrismo. Para muchos esperable, el pase directo de Escalada al kirchnerismo viene a confirmar las sospechas que se han vertido sobre este dirigente: que era funcional al oficialismo y que apuntaba a destruir al partido radical, desde adentro.
Ahora bien, después de las críticas que ha mantenido respecto del gobierno nacional y de la forma de hacer política del kirchnerismo, será difícil para Escalada recuperar algo de la credibilidad que le quedaba con este rotundo pase al partido de Cristina Kirchner. Si Escalada esperaba sumar votos de radicales que no quieran a Macri en la boleta presidencial –si este se impone en las PASO al precandidato Ernesto Sanz-, puede ir despidiéndose de esa posibilidad, tras sumarse a los “radicales sin escrúpulos” o los radicales “cooptados por el kirchnerismo”.