Tras una negociación contrarreloj, Mauricio Macri llegó a un acuerdo con Sergio Massa y Diego Bossio para derogar la Ley Cerrojo y de Pago Soberano, con lo que tendrá libertad para cerrar la conflictiva deuda con los fondos buitre, si es que logra alcanzar un entendimiento similar en el Senado, donde tallan fuerte los gobernadores peronistas.
El consenso se alcanzó anoche en Tigre. El líder del Frente Renovador recibió en su casa a los enviados del Presidente, Rogelio Frigerio y Emilio Monzó, pero debieron mudarse a un restaurant de la ciudad porque la hija de Massa comenzaba las clases en colegio nuevo y la casa estaba alborotada con las nuevas compañeritas que había invitado a conocerse.
Mientras Massa negociaba cara a cara con Frigerio y Monzó, se mantenía el diálogo con Bossio, líder del bloque justicialista que rompió con el Frente para la Victoria. Entre ambos le garantizan los votos al gobierno para aprobar en Diputados el proyecto que permite pagarle a los holdouts.
El tandilense propuso limitar la emisión de deuda a 12 mil millones de dólares, y que además sea usada para pagar únicamente a los holdouts. La propuesta de Prat Gay era endeudarse hasta 15 mil millones y utilizar el excedente para obra pública y acaso gasto corriente, de manera de reducir la emisión a la que hoy apela el Tesoro para financiarse.
Sin embargo, el planteo de Bossio -compartido por Massa- es que no se pueda tomar deuda para gastos corrientes. Además, la idea del bloque justicialista y del Frente Renovador es que una vez realizada la emisión para cerrar el capítulo con los holdouts, por fuera de eso, el Gobierno se maneje con el endeudamiento presupuestado el año pasado por el kirchnerismo, con un tope de 565 mil millones de pesos, sin lugar a nuevas emisiones.
Por su parte, Massa propuso una cláusula que establezca la emisión de deuda sólo para lo que haya que pagar a los fondos buitre, condición que finalmente habrían aceptado los enviados de Macri, que anoche se resistía a aceptar ese límite, poniendo en riesgo la aprobación del proyecto.
Es decir, la emisión se limitará hasta el pago del acuerdo, ni un dólar más. Esta cláusula prohíbe cualquier emisión para gasto corriente, aunque si se permitiría tomar nueva deuda para desarrollo en infraestructura o inversiones productivas.
Fuente: Lapoliticaonline