La decisión fue tomada por el juez federal Gustavo Fresneda; estaban esperando en la frontera de Corrientes desde el sábado, sin baños ni comida.
Los más de 80 argentinos que estaban varados desde el sábado en un ómnibus en Uruguayana, Brasil, que intentaba entrar al país por Paso de los Libres, Corrientes, lograron ingresar esta madrugada luego de que el juez federal Gustavo Fresneda los habilitara. Estaban varados y no podían ingresar al país debido a las restricciones impuestas por la pandemia de coronavirus en las fronteras. Padecieron condiciones extremas: sin baños ni comida, excepto los alimentos que les acercaban vecinos de la zona.
Tras la presentación por parte de la fundación “Apolo base para el cambio” de un hábeas corpus para solicitar que el vehículo que los transportaba pueda seguir viaje por vía terrestre, desde Brasil, Fresneda corrió vista por 12 horas al fiscal de esa jurisdicción, Fabián Martínez, y luego aprobó el pedido.
Según La Nación, el juez además resolvió que se realicen los hisopados de forma gratuita después de que desde el gobierno de Corrientes se ofrecieran a hacerlo. De acuerdo con lo publicado por el diario El Litoral, deberán permanecer en la provincia 10 días para cumplir con la cuarentena. Solo después podrán regresar a sus hogares.
En el escrito de la medida judicial, Fresneda pide al director del hospital local San José que realice las pruebas de coronavirus a las personas que figuran en la lista de varados y asimismo ordena que se le remita una copia de los resultados. Los test se realizaron en la cabecera del puente internacional, “con todas las medidas de seguridad e higiene”, de acuerdo con el texto.
El caso, uno de los tantos de los argentinos que quedaron en el extranjero luego de que se confirmaran las cancelaciones de los vuelos provenientes de Brasil, Chile y México, provocó tensión entre la provincia y la nación, luego de que la directora de Migraciones, Florencia Carignano, afirmara en diálogo con LN+ que en Corrientes no querían que el ómnibus entrara porque la situación epidemiológica allí estaba complicada.
“Necesitamos que la gente entienda que las fronteras terrestres están cerradas desde el 25 de diciembre, no por capricho, tenemos 237 pasos y no podemos instalar allí laboratorios para testear”, había dicho la funcionaria nacional. Tras ello había agregado: “No tenemos manera de testear a la gente, son 83 personas que estuvieron por Brasil, parando en baños, comiendo, y llegan a Uruguayana, que está al tope, no hay una sola cama. Y del otro lado están los argentinos que no quieren que ingrese la cepa de Manaos. Corrientes está en una situación complicada”, se excusó por la inhumana situación que padecieron los varados en Paso de los Libres.
Sin embargo, en respuesta a sus dichos, el director del hospital local San José, Jorge Ferreyra Dame, dijo que el brote estaba controlado e insistió en que la provincia sí estaba lista y tenía disponibilidad para recibir a los más de 80 argentinos.
Y horas más tarde el gobierno correntino, a través de un comunicado, indicó que “un equipo de Salud ya está disponible para iniciar las tareas y, así, contribuir a agilizar los protocolos necesarios”, de acuerdo con lo publicado por la agencia Télam, y solicitó “al Gobierno Nacional que permita ingresar a los ciudadanos argentinos varados en el paso fronterizo”.
Ante la llegada de la segunda ola de coronavirus, que según las autoridades sanitarias ya es inminente, el sábado pasado se suspendieron los vuelos procedentes de Brasil, Chile y México y también se instalaron más controles para los argentinos que regresen del exterior. Asimismo, se desalentaron los viajes hacia otros destinos.