En el “lugar en el mundo” de Cristina Kirchner, los negocios de Lázaro Báez se expandieron constantemente. Obras de pavimento, construcción de viviendas particulares, proyectos del hotel propio, son parte de sus proyectos e inversiones en medio del avance de la Justicia sobre él y la crisis financiera que sostiene que vive su holding.
Aunque sus inversiones no se detuvieron, ni el incremento patrimonial que en cinco años creció 1.200%, Báez inició el año declarándose sin fondos para cumplir con sus empleados. La crisis de su grupo repercutió en toda Santa Cruz, donde además el empresario amigo de los Kirchner, adquirió 25 estancias (427.033 hectáreas según el registro catastral) y constituyó catorce empresas y su patrimonio llegó a $66.851.903, pero aún aduce que tiene “falta de liquidez”.
En El Calafate todos los saben. Las propiedades y construcciones del empresario K son un secreto a voces, pero no deja sorprender que muchas de ellas no sean habitadas. “Algunas se construyen, al poco tiempo ves que las están reparando de nuevo y así pasan en obras mucho tiempo”, señaló un vecino del paseo “Presidente Néstor Kirchner” donde se erige una de las casa de Lázaro Báez.
Otra casa de Báez.
Rejas negras, piedras a la vista, la casa de dos plantas tuvo poco movimiento últimamente. Los vecinos aseguran que solo ven “una camioneta de Austral, y una persona que custodia el lugar; pero nunca vimos a Lázaro vivir ahí, la refaccionan todo el tiempo, pintan el frente, lo cambian”.
La casa que aparece en la causa Hotersur El inmueble es parte de los 79 que el socio de los Kirchner declaró en la causa Hotesur. El valor de sus propiedades asciende a $ 16.767.734,60. Esta casa de dos plantas fue refaccionada hace pocos meses, pero Lázaro Báez pasa el mayor tiempo a 300 kilómetros de la villa turística, en Río Gallegos donde se concentraron los mayores reclamos de la UOCRA cuando se declaró sin liquidez y procedió al despido de 1.800 trabajadores.
En medio del fin de la temporada de verano en la villa turística, donde el ritmo de la ciudad lo marcan los visitantes locales y extranjeros, se imponen las construcciones de Lázaro Báez. En el barrio Cañadón, la propiedad con dos caminos de tierra que permiten su acceso, se visualiza a lo largo de más de 300 metros de largo, con el particular naranja con el que suele pintar sus viviendas. Un doble cercado de álamos y media sombra negra rodea la gran casa que cuenta con un estacionamiento para 14 vehículos. Cuenta además, con cancha de fútbol y un importante sistema de seguridad privada.