“No vamos a asistir al que no haga las cosas bien”. La frase molestó a muchos gobernadores que justamente vienen pidiendo premiar sus administraciones y no aportarles fondos discrecionales a la provincia o aumentar la coparticipación de la Ciudad, como hizo el presidente Mauricio Macri en sus primeros 40 días de gestión. Este martes, el presidente reavivó la polémica con los gobernadores por los fondos coparticipables, luego de la decisión de duplicar la Coparticipación de Capital Federal y enviar 14 mil millones de pesos a Buenos Aires, dos distritos gobernados por el macrismo.
Mientras arrecian las críticas a Macri por estas decisiones que favorecen a dirigentes del PRO, el presidente no se inmuta y sostiene que los envíos sólo serán destinados a las administraciones “eficientes”, casualmente, las del partido Propuesta Republicana.
Los gobernadores montaron en cólera y algunos amenazan a ir a la Justicia para no ser discriminados. El más enojado es el pampeano Carlos Verna -un justicialista-, quien reclama hace tiempo un reconocimiento a la buena administración de su provincia.
En tanto que, una visita a Córdoba donde prometió obras a Juan Schiaretti, por unos 15 mil millones de pesos, Macri eludió referirse a las tensiones por la coparticipación con esa provincia y los intendentes de Cambiemos, pero se metió en la discusión con los mandatarios que amenazan con ir a la Justicia para que le restituyan el 15% de los fondos coparticipables. Este reclamo está sustentado en parte, en el fallo de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, que ordenó la restitución a las provincias de Córdoba, Santa Fe y San Luis de las retenciones para financiar a la Anses. Claro que estas provincias mantienen una disputa judicial con la Nación -entonces gobernada por Cristina Fernández-, y sacrificaron inversiones nacionales en sus territorios.
Según LPO, Macri dijo en torno a la controveria: «La coparticipación una vieja deuda pendiente que siempre parece muy difícil de resolver porque todo el mundo se junta y suman 140 cuando tienen que ser 100», afirmó Macri en una conferencia conjunta con el gobernador cordobés Juan Schiaretti, tras una reunión conjunta de los gabinetes de Nación y Córdoba.
El mandatario agregó que su intención es «empezar a devolver herramientas e instrumentos para que cada provincia pueda ir adelante y volviendo al sentido de este país, que es el federalismo», aunque evitó referirse a la polémica por la devolución del 15%.
No obstante, advirtió que «no puede ser que uno siempre esté asistiendo a aquel que no hace las cosas bien y discrimine al que las hace bien», en un mensaje para los gobernadores que tienen mayores desequilibrios en sus finanzas, muchos de los cuales por las herencias que recibieron.
Al respecto, Macri agregó que «Córdoba es una de las provincias que mejor se ha administrado en los últimos años» y recordó que «fue discriminada» por «no alinearse políticamente con el ex gobierno nacional». «La discriminación surgía de que bueno ´si te administrás bien no te damos nada´. La realidad tiene que ser que uno apoye al que quiere crecer y que hace las cosas bien», ahondó el mandatario, ratificando su idea de premios y castigos.
Desde luego, esta puja con los gobernadores tendrá su correlato en el Congreso, donde el oficialismo podría tener problemas para conseguir quórum o la sanción de diversos proyectos de ley, a partir de Marzo, cuando se reanuden las sesiones ordinarias.