El artículo 90 del presupuesto de la nación que envió Sergio Massa al Congreso le permite retener coparticipación a las provincias que adeuden a Cammesa, la empresa mayorista de energía que cubre sus déficit con fondos del Tesoro nacional. Misiones es una de las que más debe.
El texto obliga a los gobernadores a hacerse cargo de las deudas de empresas públicas o privadas que brinden el servicio en sus provincias.
En el ranking de deudores, se ubica Edenor en primer lugar con un saldo de $112.076 millones y Edesur, de $116.138 millones. Entre ambas, representan el 43% del total que acumula Cammesa.
Luego vienen Emsa la prestataria de la provincia de Misiones y la prestadora del servicio eléctrico del Chaco (Secheep), con 32.967 millones de pesos.
El polémico artículo 90 obliga a provincias y municipios «como titulares de servicio público de distribución de energía eléctrica de su respectiva jurisdicción», a «controlar y garantizar el estricto cumplimiento del pago de las transacciones por consumos de energía, potencia y sus conceptos asociados, por parte de los prestadores del servicio público de distribución de energía eléctrica de cada jurisdicción».
Se les otorga a las provincias 6 meses para adecuar legislación local para asegurar el pago a Cammesa y establece que el Gobierno nacional podrá «retener, de los fondos comprometidos en los convenios de transferencias presupuestarias suscriptos entre cada jurisdicción provincial y cualquier entidad del sector público que por consumos de energía y potencia adeuda a Cammesa el prestador del servicio público de distribución a su cargo».
De esta manera, si una empresa distribuidora no le paga a Cammesa el gobernador de la provincia en la que presta servicio deberá afrontar la deuda como un descuento de la coparticipación federal, que se gira en forma automática a la recaudación.
La principal queja de los mandatarios, por ahora en off the récord, es que el artículo deja afuera a las concesiones nacionales como las de Edenor y Edesur, que nunca fueron transferidas a la Ciudad y la provincia de Buenos Aires.
Pese a que la provincia se jacta de tener superávit la deuda con la mayorista de energía podría poner en jaque a los recursos que vienen de nación con el cual se afrontan la mayoría de los gastos corrientes de la provincia y los municipios.