Los precandidatos José Manuel De La Sota (FE) y Sergio Massa (Frente Renovador) temen que el Frente para la Victoria pueda imponerse en primera vuelta si se mantiene fragmentado el importante caudal de electores que rechazan a la continuidad del “modelo” kirchnerista. Según los cálculos que están realizando, entre un 60 y un 70% del electorado pretende un cambio de gobierno, pero en caso de mantenerse firmes las candidaturas del PRO-UCR y el Frente UNA (Unidos por una Nueva Argentina, en el que competirán Massa y De La Sota), la dispersión del voto permitiría al oficialismo alcanzar los 40 puntos, con más de 10 de ventaja sobre su inmediato perseguidor.
De acuerdo con LPO, este jueves por la noche hubo una reunión entre el líder del Frente Renovador y el gobernador de Córdoba con sus estrategas de campaña. Estaban el publicista español especialista en campañas electorales, Antonio Sola; el asesor peruano Sergio Bendixen, por parte de Massa; y el brasileño Joao Santana, que trabaja con el cordobés. Encuestas en mano, el análisis fue básicamente cómo seguir ante la llegada del cierre de alianzas el 10 de junio y el cierre de listas el 20 del mismo mes.
Lo primero que vieron es que hay alrededor de un 60 por ciento de votos que quieren un cambio, pero ese electorado todavía no definió su voto. Es decir, una vez definido el escenario en junio, el último tramo de la campaña hasta agosto será vital. En las caminatas, la gente les dice que se junten para ganarles al kirchnerismo y lo mismo arrojan los estudios cualitativos que realizan. La disposición para una primaria abierta está en agenda, si Macri se niega será quien pague ese costo político, prometieron desde el espacio UNA.
La orden ya empezó a bajar. Ayer Roberto Lavagna cuestionó al PRO y dijo que «no hay nada peor que no hacer el intento de ganarle al oficialismo». Hoy Malena Galmarini pidió lo mismoy Joaquín de la Torre, un intendente del Conurbano bonaerense, fue más allá, sosteniendo que Daniel Scioli y el jefe de gobierno porteño tienen un acuerdo por lo bajo para bajar a Massa.
“Hace un año que Scioli y Macri tienen un acuerdo por abajo de la mesa, muestran que son amigos, juegan juntos al ajedrez, sus padres jugaban juntos al ajedrez, tienen una alianza para tratar de bajarlo a Sergio”, denunció de la Torre, un dirigente de la “mesa chica” del Frente Renovador. “Esa alianza no es con consentimiento del gobierno nacional, por eso creo que Scioli se va a quedar en la puerta y no va a poder ser candidato. Va a ser (Florencio) Randazzo, porque Cristina (Kirchner) no le va a dar la candidatura a alguien que tiene un acuerdo con Macri”, argumentó.
“¿Por qué Macri no acepta una interna abierta? Porque tiene un acuerdo con Scioli, son amigos”, sentenció el alcalde bonaerense.