El presidente se mostró más flexible y pidió deponer los intereses partidarios. Los liberal-libertarios abuchearon a Pullaro cuando recitó el Preámbulo como Alfonsín.
El presidente Javier Milei llegó a Rosario para el acto por el Día de la Bandera y mostró una sintonía distinta, quizá inaugurando una nueva era con su convocatoria a “todas las autoridades políticas, los gobernadores, dirigentes de los principales partidos políticos, ex presidentes, empresarios y trabajadores”.
De acuerdo con LPO, el objetivo sería firmar el malogrado Pacto de Mayo el próximo 9 de julio en Tucumán, para el Día de la Independencia.
En ese sentido, Milei ensayó una apertura amplia a la política y sin condicionamientos, como lo hizo en el primer llamado. Al punto tal que se cuidó de no excluir a nadie, ni al peronismo, y pidió: “depongamos las anteojeras partidarias y despojemos de nuestros intereses particulares para trabajar para volver a ser una potencia”.
“Quiero invitarlos a repetir este gesto de compromiso que es jurar por la bandera. Sueño con un mundo en el que la bandera flamee alto en el cielo orgullosa entre las naciones más prosperas. Que escribamos un nuevo capítulo en la historia del progreso argentino. Para poder alcanzar ese sueño es fundamental que todos los que compartimos la causa de la libertad depongamos las anteojeras partidarias, nos desprendamos de nuestros intereses particulares y trabajemos juntos”, sostuvo Milei.
En un moderado discurso, el mandatario destacó la figura de Manuel Belgrano, al que definió como “un maximalista de la libertad” y un “ejemplo de austeridad y honradez en el ejercicio de la función pública” y, tras un breve racconto histórico, realizó algunos paralelismos con la actualidad, de acuerdo con Noticias Argentinas.
“La Libertad no pide permiso, se impone”
“El Gobierno de Buenos Aires rechazó y le pidió que izara otra bandera porque el Gobierno de Buenos Aires aún no hablaba de independencia, no hablaba de un país libre, sino de un gobierno autónomo de las autoridades virreinales, pero fiel a la corona, a Fernando VII”, planteó, y aclaró: “En consecuencia, no querían mandar un mensaje diplomático equivocado, querían cuidar las formas, como algunos les gusta hoy. Guiados por el miedo porque aún no se animaban a ser libres”.
En la misma línea, continuó: “Otros porque directamente quería seguir siendo súbditos, trataron de despojar al ejército de un símbolo que gritaba independencia y así no autorizaron al pueblo que se diera a sí mismo una primera bandera propia”.
“Pero a Belgrano le importó un rábano las ordenes de las elites porteñas y llevó su insignia a las batallas. No espero la autorización de nadie e hizo lo que esperaba correcto, algo que se ha convertido en una sana costumbre en el interior del país cuando las decisiones de los políticos de buenos aires son excesivas e infundadas”, remarcó el mandatario.
Visiblemente emocionado, continuó: “La Libertad no pide permiso, se impone. No se esperan las órdenes de ningún burócrata que especula qué conviene y qué no. La libertad es un instinto innato de ser argentino porque es ineludible por más que unos pocos se resistan o la quieran contener”., exhortó
El llamado a ex presidentes sugirió una invitación especial a Mauricio Macri, en medio de la puja con Patricia Bullrich por el PRO. Además, fue un tiro por elevación a su hermana, Karina Milei, quien puso todo su esfuerzo en armar el partido La Libertad Avanza y presentar candidatos liberal-libertarios propios en cada distrito provincial.
De esta manera, el presidente dejó de lado la actitud confrontativa para mostrar un perfil más amable, sorprendiendo a propios y ajenos, a pocas horas de que un puñado de diputados de LLA, entre los que estaba la obereña Florencia Klipauka, enfurecieran en Salta con Victoria Villarruel porque entendieron que avaló el reclamo de obra pública que hizo el gobernador Gustavo Sáenz en el acto del prócer Martín Miguel de Güemes.
El fuerte reclamo de Pullaro a Milei
De hecho, antes de que hable Milei, el santafesino Maximiliano Pullaro también reclamó por la necesidad de obras de infraestructura para la provincia, que tiene el principal polo portuario. Por allí sale el 80 por ciento de las exportaciones y tiene los accesos viales detonados. “Señor Presidente, mire a este país, mire al interior productivo, nos faltan obras de infraestructura para desarrollarnos y poder desplegar todo el potencial que tiene nuestro país”, sostuvo el mandatario santafesino en su alocución.
En ese marco, Pullaro se refirió al acompañamiento al ajuste fiscal que hicieron algunas provincias para ponerse en línea con el equilibrio nacional: “También necesitamos que nuestros jóvenes estén en las universidades para unir el conocimiento con el sistema productivo. Y por supuesto que necesitamos equilibrio fiscal; y desde las provincias estamos acompañando el esfuerzo que hace el gobierno nacional”, puntualizó.
“Pero también necesitamos desarrollo económico, crecimiento y unificar nuestro sistema educativo con nuestro sistema productivo, necesitamos federalismo”, advirtió Pullaro y cerró: “Santa Fe es el campo, es la industria, es el comercio, es el río, el conocimiento para salir adelante. Vuelva, que sea siempre bienvenido aquí cada 20 de junio. Somos el interior productivo que siempre sacó adelante a la Argentina”.
No casualmente, la mayoría de los silbidos de los seguidores de Milei se los llevó Pullaro cuando comenzó a recitar el Preámbulo de la Constitución, evocando a su padre político, Raúl Alfonsín, una de las figuras más atacadas por Milei.