El diputado de la UCR aceptó el ofrecimiento que le hicieron desde el Pro y será el candidato a vice de Ziegler. La decisión terminó de madurar el último fin de semana y el legislador radical la aceptó luego de hablar con varios de sus correligionarios, entre ellos varios son candidatos a intendente y concejales del frente Vamos Juntos. Esto causó revuelo en el centenario partido que viene golpeado de las PASO, tras el escaso acompañamiento logrado en las urnas.
“La provincia va en muy mal camino, vamos a terminar como Formosa u otras provincias feudales, digamos. Tenemos que hacer algo para cambiar”, afirmó Pegoraro, en diálogo con M4 esta mañana, en una entrevista en la que prácticamente confirmaba su acercamiento al frente “Vamos Juntos”, que integran el PRO, el partido FE y Trabajo y Progreso, entre otros.
El diputado provincial, como lo reveló este medio, tiempo atrás, fue uno de los que pugnaban porque el radicalismo integre un frente con el macrismo, emulando el espacio conformado a nivel nacional, lo que, en esta coyuntura, implicaba que Gustavo González, el candidato a gobernador, se baje de su candidatura. “La dirigencia y una parte de la UCR no estuvieron a la altura de las circunstancias, o no tuvieron la humildad (necesaria) para organizar el frente”, opinó Pegoraro, en declaraciones que parecieron apuntar al joven legislador eldoradense, quien aparece como el responsable de la ruptura del frente con el PRO.
“Gran parte del radicalismo me apoya en esta decisión que estamos pensando. Hay que animarse a pelear (por la gobernación), con treinta años de historia del partido (en Misiones)”, consideró el diputado, quien sería acompañado por no menos de 20 sublemas radicales del interior de la provincia, en su acercamiento al PRO.
Consultado al respecto de si podría terminar expulsado de la UCR, por su decisión de formar parte de la fórmula de “Vamos Juntos”, con Ziegler, Pegoraro explicó: “No creo que sea expulsado, porque (a principios de año) de los diez representantes de la UCR Misiones en la convención nacional de Gualeguaychú, siete votaron para que se haga este frente (Cambiemos, entre el PRO y la UCR)”, subrayó.
“No sé qué pasó, que vinimos de allá e hicimos otra cosa. Tienen que explicar los dirigentes del partido, y los otros candidatos, por qué fuimos por otro lado”, disparó, sin puntualizar a ningún dirigente, aunque los principales responsables, serían González, Germán Bordón y el presidente del partido, Hernán Damiani. “No estoy para juzgar lo que hicieron. Esta es la oportunidad para cambiar algo, creo que es el camino”, reflexionó.
Finalmente, Pegoraro dejó en claro que un sector importante de la militancia radical está a favor de unirse al PRO, con vistas a pelear la gobernación, con el fuerte espaldarazo que significa tener a Mauricio Macri como candidato presidencial. “Un 90% de los radicales con los que hablé, que están de acuerdo. Pero no se animan a mostrar la cara. Hay que ser valiente”, cerró el candidato a vicegobernador de Vamos Juntos.
Cabe acotar que González, Bordón y Damiani aparecen como los responsables por romper el frente opositor en lecturas que apuntan a condicionantes políticos bastante evidentes, en cada uno de los casos. El cargo de Bordón como diputado provincial pende de un hilo: tiene una causa abierta en el Inadi por violencia de género –tras la denuncia de su par, ya expulsada del radicalismo, María Losada. Una orden del presidente de la Cámara Carlos Rovira a los diputados renovadores que son sus subordinados, y avanzaría un juicio político y expulsión del diputado. Fuentes confiables de este medio, revelaron que existió un acuerdo para que Bordón se niegue al frente con el PRO y Ziegler, e impulse una alianza con el Socialismo y el GEN –lo que abre la posibilidad de pegar al radicalismo misionero a la boleta presidencial de Margarita Stolbizer. Esto debilitaría electoralmente al radicalismo, pero permitiría a Bordón, conservar su cargo.
González es apuntado por no bajarse de su candidatura y así allanar el camino para el frente con el PRO, que acordó con Ziegler, una figura que mide mucho mejor que su coterráneo radical. Por otra parte, González evitó brindar definiciones políticas previamente al cierre de los plazos electorales para la inscripción de frentes. Se negó a contestar si apoyaría la candidatura de Macri y hasta vaticinó que el presidencial Ernesto Sanz ganaría en las PASO en Misiones. Después, evitó negarse desde un principio a una alianza con el peronismo de Ramón Puerta y Adolfo Velázquez (Frente Unidos), que aceptaban que sea el candidato a gobernador –algo que sí hizo Ziegler.
Por su parte, Damiani es el principal beneficiado con la ruptura del frente en las PASO: si competían en las primarias con el PRO, los radicales habrían perdido y no podrían haber presentado candidaturas a diputado nacional –aunque no tendrían ningún inconveniente en llevar la boleta de Macri en Octubre. Como el PRO y la UCR fueron en espacios distintos, Damiani, el candidato a diputado nacional más votado en la interna del radicalismo –aunque con una performance electoral paupérrima-, se podrá presentar en las generales. Sin embargo, desde el PRO ya aclararon que Macri no permitirá que peguen su boleta a partidos que no formaron parte del frente Cambiemos, en el distrito Misiones –ello implicaría que el candidato a diputado nacional del PRO, Humberto Schiavoni, divida votos con los radicales, más concretamente, con Damiani. Si Macri va o no en la lista de la UCR Misiones, es algo que no está definido, pero las actitudes de estos tres dirigentes, explican el profundo malestar que hay en los militantes, que están viendo –una vez más- como los referentes anteponen sus intereses políticos personales, a la pelea por conquistar el poder en la provincia.