Sorprende el cambio en la postura del gobierno de Misiones frente a Nación por el tema de los impuestos coparticipables, después de 12 años de genuflexión. Claro, el contexto político y económico es diferente: ahora no gobierna un espacio político aliado a la Renovación y un fallo de la Corte Suprema, formalmente avala el reclamo de devolución del 15% de fondos coparticipables para el financiamiento de la ANSES. En el marco de la relación tensa entre nación y provincia, este jueves tuvo lugar la primera de las reuniones con vistas a zanjar el conflicto con las provincias que no fueron incluidas en una devolución que desfinanciaría al estado nacional en nada menos que 90 mil millones de pesos. Culminada la reunión entre el Ministro del Interior, Rogelio Frigerio y los titulares de las carteras de Hacienda de todas las provincias, el misionero Adolfo Safrán explicó que pretenden “un verdadero federalismo” y “la transferencia automática de los fondos”. Este planteo representa un giro de 180 grados en la posición del gobierno “misionerista” y del propio Safrán, que asumió en Hacienda en la última etapa del gobierno de Maurice Closs y las “relaciones carnales” entre la Renovación y el kirchnerismo.
Luego de participar de la reunión con Frigerio, y con el Ministro de Hacienda y Finanzas de la Nación, Alfonso Prat Gay, el contador apostoleño indicó a un medio afín al oficialismo de la Renovación K: “Hay que agradecer al ministro Frigerio por la predisposición que ha tenido en recibir a todos los gobernadores primero y ahora a todos los ministros de Economía para fijar una agenda de trabajo muy amplia. Es hablar justamente de un verdadero federalismo que busca la transferencia automática de recursos por fuera de lo que pueden ser transferencias discrecionales”, detalló Safrán, según MOL. El funcionario reveló también que la próxima reunión para llegar a un acuerdo con respecto a esta masa de fondos coparticipables –para Misiones, unos 200 millones de pesos mensuales- será el 16 de Marzo.
De acuerdo con Safrán, el titular del Ministerio del Interior “planteó la imposibilidad de acceder a una devolución de la totalidad debido al fuerte déficit fiscal que administra el tesoro nacional, que según los datos que nos brindaron rondan el 4,85 por ciento del producto bruto interno. Es decir, cualquier otra medida de estas características va al generar un agujero fiscal a la Nación pero se plantearon soluciones intermedias mientras se avanza en un mediano plazo a una solución definitiva”, comentó el ministro.
“Si bien en lo inmediato ve de manera imposible (devolver los fondos retenidos desde tiempos del gobierno de Cristina Kirchner), igualmente entiende Frigerio que debe haber alguna medida intermedia, es decir un paliativo para ir resolviendo este tema. Mientras se busca la forma de resolverlo en un futuro no muy lejano”, aseveró el funcionario que jamás osó a formular ningún tipo de reclamo al gobierno nacional cuando el kirchnerismo estaba en el poder.
Cabe acotar que se trata de una negociación tensa, en donde Nación y provincia tienen distintas herramientas para ejercer presión: el gobierno renovador puede negar el apoyo a iniciativas del presidente Mauricio Macri en el Congreso de la Nación; en tanto que el Ejecutivo Nacional puede presionar con la Reforma Política (adopción de la Boleta Única y las PASO, derogación de la Ley de Lemas en Misiones), con el no envío de fondos para obras públicas y programas nacionales, y un amplio etcétera. No obstante, lo llamativo es que ni Safrán ni Passalacqua –ni mucho menos el presidente de la Cámara y conductor de la Renovación, Carlos Rovira- se ruborizan al momento de efectuar el reclamo por el 15%, después de 12 años de arrodillarse ante las administraciones kirchneristas.
El fallo de la Corte que ordenó la devolución de los fondos a las provincias de Santa Fe, Córdoba y San Luis, se originó en una demanda judicial presentada y sostenida por estas provincias, que sufrieron el castigo del gobierno de Cristina Kirchner, con el recorte en obras y programas a esas provincias. Las demás provincias, como la controlada por la Renovación K, que no llevaron a cabo reclamos legales, ahora pretenden el mismo trato que aquellas que sí estuvieron enfrentadas al régimen kirchnerista. Pero es entendible. Los tiempos cambiaron y con ellos, las posturas de los funcionarios.