Luego de que el juez Daniel Rafecas aceptara el pedido de apelación hecho por el fiscal Gerardo Pollicita, la denuncia que el magistrado presentó contra la presidenta Cristina Fernández de Kirchner por supuesto encubrimiento en la causa AMIA, pasó a la Cámara Federal, la cual deberá de analizar el expediente.
La Sala Primera de la Cámara Federal fue designada por sorteo para intervenir en la apelación del fiscal Gerardo Pollicita contra la desestimación de la denuncia del fiscal Alberto Nisman en la que apunta a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner por presunto encubrimiento en la causa AMIA. Es la misma que en 2014 pasado declaró la inconstitucionalidad del Memorándum “de entendimiento” entre la Argentina e Irán.
De acuerdo con la versión de Perfil, la sala está integrada por los jueces Jorge Ballestero, Eduardo Farah y Eduardo Freiler. Es el mismo tribunal que en las últimas semanas ratificó el procesamiento del vicepresidente Amado Boudou en la causa de la imprenta calcográfica Ciccone, por tráfico de influencias y negociaciones incompatibles con la función pública.
Si la Cámara hace lugar a la apelación de Pollicita, puede ordenar al juez Rafecas a continuar con la investigación, o al contrario, quitarle la causa al magistrado de quien se puede inferir que ya ha emitido una opinión sobre una causa en la que debe actuar con imparcialidad. Pollicita había considerado “apresurado” y “extremo” el fallo de Rafecas, desestimando la acusación contra la presidente CFK, sin la realización de ninguna de las 46 medidas de prueba solicitadas por el fiscal.
Pollicita trabajó en base a la denuncia y las pruebas recolectadas por el fiscal Alberto Nisman, quien apareciera muerto en su departamento de Puerto Madero, hace 46 días, poco después de solicitar la imputación y un embargo contra CFK, el canciller Héctor Timerman, el diputado nacional de “La Cámpora” Andrés Larroque, y los piqueteros K Luis D’Elía (Miles) y Fernando Esteche (Quebracho).