La indicación aparece bien clara en la hoja de ruta: para ganar el ballotage, los aspirantes a la presidencia tienen que convencer al votante que el 25 de octubre se inclinó por Sergio Massa. Mientras los analistas estudian el comportamiento de esa porción del electorado -5,2 millones de votos, poco más del 21%- para poder adelantar quién será el próximo jefe de Estado, Felipe Solá les dio una pista contundente: afirmó que mayoritariamente elegirían al referente de Cambiemos.
«La composición de nuestro voto es 65% a 35% en favor de Mauricio Macri, lo que impedía que Daniel Scioli ganara en primera vuelta y que Mauricio Macri creciera», diagnosticó el ex candidato a gobernador por la provincia de Buenos Aires, en declaraciones a Nacional Rock. «Cuando aparece una ola de cambio es difícil para el que no representa el cambio sino la continuidad», evaluó Solá, quien prefirió no revelar a quién va a elegir en la segunda vuelta, ya con Sergio Massa fuera de carrera.
Todavía sorprendido por los resultados, el ex gobernador bonaerense admitió a Infobae, que no pensó que María Eugenia Vidal le iba a ganar a Aníbal Fernández, ni que Macri iba a estar tan cerca de Scioli. Para explicar esos números, el exgobernador bonaerense señaló: «Empezaron a moverle el piso a Scioli, Aníbal Fernández hizo la no campaña. Recibía en su despacho, no hay fotos de Aníbal con el pueblo porque pensaba que era un trámite. Alguna que otra vez se tomaba una avión para ir a la Provincia», fustigó.
Finalmente, al ser consultado sobre a quién irá su voto, Solá respondió: «En el Frente Renovador decidimos un acción en conjunto pero después algunos dijeron lo que pensaban. A los peronistas nos cuesta muchísimo votar a Macri. No importa para quién va a ir mi voto, no vuelca la balanza para ningún lado. El voto es propiedad del pueblo y no de nosotros para decir a quién tienen que votar», sentenció.