Al reclamo que lleva una semana en Oberá se suman las marchas y movilizaciones en Montecarlo, y las asambleas en Alem y San Vicente.

Los municipales en la mayoría de los casos exigen incrementos superiores al 30% o el 14% anunciado por el Gobernador para la administración pública, pero con un adicional no remunerativo para mejorar sus salarios que prácticamente en todos los casos no llegan ni siquiera a los $16.875 del mínimo vital y móvil.
La mayoría de los jefes comunales se ven en un aprieto, aseguraron por lo bajo que es casi imposible cumplir con los requerimientos de los trabajadores ya que producto de la pandemia se ha reducido la recaudación y los fondos de coparticipación son insuficientes, por lo que muchos deberán pedir un auxilio a la provincia en caso de no poder resolver los reclamos.
