Banco Central de Brasil volvió a acelerar la depreciación de su tipo de cambio en 2% hasta 3,12 reales por dólar y continúa en niveles de hace más de una década. En lo que va del año, la moneda brasileña se devaluó 15,2%, mientras que el peso argentino cayó 3,41%. La novedad encarece el precio de las exportaciones argentinas al país vecino, en especial las manufacturas de origen industrial, según La Nación. Se trata del principal destino para las exportaciones argentinas, por lo que se convierte en un factor clave para el desenvolvimiento de la economía del país.
En un contexto en el que el gobierno de Dilma Rousseff mantiene su interés en la introducción de un paquete de austeridad fiscal para reducir el déficit en las cuentas públicas, a pesar de la oposición del Congreso y gran parte de la población. Los recortes presupuestarios «son como ir al dentista, nadie quiere ir (…) pero de vez en cuando tienes que hacerlo», dijo Aloizio Mercadante, jefe de gabinete de Rousseff, a periodistas. En este contexto, la devaluación del Real forma parte del paquete de medidas económicas para reducir el déficit. Sin embargo, implica una fuerte pérdida del poder adquisitivo de los salarios, por lo que Rousseff continúa enfrentando protestas en todo el país.
En los últimos días, el Congreso ha rechazado medidas de austeridad como un aumento en el impuesto a la renta, en parte porque algunos legisladores están molestos con Rousseff por haber sido incluidos en una investigación sobre corrupción vinculada a la estatal Petrobras, según el diario mencionado.
Rousseff defendió los recortes de presupuesto en un discurso televisado el domingo por la noche, pero la respuesta de buena parte de la población fue clara: rechazo y movilizaciones en las principales ciudades.
En cuanto a la devaluación, complicará aún más las exportaciones argentinas, en particular, las manufacturas y las oleaginosas, puesto que los precios en Argentina, perderán competitividad con relación al vecino país. Por otra parte, el Ministro de Economía Axel Kicillof, sostuvo la semana pasada que el gobierno nacional no devaluará la moneda, acompañando el proceso de Brasil.