La esforzada victoria del PRO en el Ballottage porteño caló hondo en la dirigencia del partido de Mauricio Macri, que recibió numerosas críticas de todo el arco político. Dirigentes del oficialismo y la opisición apuntaron a que un resultado de apenas 3 puntos de su candidato Horacio Rodríguez Larreta, muestran una debilidad en el proyecto presidencial del PRO. Este lunes, el propio Macri salió a responder las críticas y, de acuerdo a su balance, la ajustada victoria sobre el candidato del espacio ECO, Martín Lousteau, no afecta a su candidatura presidencial.
«Ganar es un honor, la responsabilidad de gobernar la Ciudad de Buenos Aires por tercera vez no es una tarea simple. Ganar una elección con semejante nivel de exigencia, con una Constitución que exige ni lo que exige la presidencia de la República, nos llena de alegría», señaló Macri.
«Lousteau fue impulsado por (Elisa) Carrió y (Ernesto) Sanz y además recibió el apoyo total del kirchnerismo», puntualizó Macri, que en caso de perder en su propio territorio, se habría tenido que bajar de la carrera presidencial. Según su visión, entre el postulante del PRO y el de ECO «se generó entonces un desafío adicional, no previsto», y por eso «el triunfo tiene más valor».
Por otra parte, Macri negó que en el búnker del PRO esperaban una victoria de más de 10 puntos, como lo anticipaban las encuestas que maneja su jefe de campaña, Jaime Durán Barba. «Nosotros aspirábamos a dos puntos más, yo dije un 54% y al final salió casi 52%, nunca pensamos en sacar 60%. Eso hubiera ocurrido si llegábamos a una final con el kirchnerismo, pero este fracasó y no llegó al ballottage», señaló cargando sobre el oficialismo, en respuesta a las críticas que ha recibido porque 5 de cada 10 porteños no eligieron al proyecto del PRO.
Asimismo, Macri negó que el espacio opositor que integra el PRO haya hecho malas elecciones en los distritos que ya votaron. «En Córdoba hicimos una gran elección, y en Santa Fe los votos que perdió (el “Cachi”) Martínez (el candidato del Frente Renovador) en la primera vuelta se los llevó Perotti», analizó, y agregó: «En Mendoza lo que armamos con el radicalismo y el Partido Demócrata ganó cómodamente», puntualizó, restando importancia a la imposibilidad de festejar un triunfo electoral con candidatos propios, excepto por Ciudad de Buenos Aires, ayer y con gran incertidumbre.
«Hay que ver el vaso medio lleno, en ningún lugar se ve el mensaje que dan ellos (el kirchnerismo) de que ya ganaron. En la Ciudad jugaron todo lo que pudieron para que el candidato que no era de ellos gane y no lo pudieron lograr», afirmó en una entrevista con Radio Mitre.
El actual Jefe de Gobierno Porteño salió a contestarle al hijo de la presidente y candidato a diputado nacional por Santa Cruz, Máximo Kirchner, quien se mofó por el cambio de discurso de Macri, consumada la ajustada victoria de su candidato. Máximo ironizó sobre los dichos de Macri en relación a YPF y Aerolíneas Argentinas: «Cuando lo escuché hablar pensé que era Mariano Recalde. Está bien que el nombre del frente ´Cambiemos´».
La respuesta de Macri fue lapidaria: «Nosotros creemos en la presencia del Estado para beneficio de la gente, no para darle laburo a los de La Cámpora», disparó, en obvia referencia a la agrupación de jóvenes K creada por el hijo de la presidente, que ha colonizado buena parte de los cargos estatales.
«Si nos opusimos en su momento a lo de Aerolíneas era porque veíamos lo que estaban haciendo, no es una cuestión de relato, sino de realidad. Necesitamos bien administradas. Y de YPF tenemos que recordar que ellos estaban gobernando cuando la privatizaron en los 90 y después la confiscaron y eso es violar la Constitución, generando un enorme descrédito para la Argentina», concluyó.